21.5.06

Marito.

No es por arrimar el ascua a mi sardina, pues no creo que coincida con lo que yo dije ni se pueda utilizar para apoyar mis tambaleantes teorías, pero, como estoy completamente de acuerdo con él y además (sólo faltaría) me parece magníficamente escrito, quería compartir con ustedes, a falta de uno propio, este texto:

(...) que la cultura, la literatura, las artes, la filosofía, desanimalizan a los seres humanos, extienden extraordinariamente su horizonte vital, atizan su curiosidad, su sensibilidad, su fantasía, sus apetitos, sus sueños, los hacen más porosos a la amistad y al diálogo, y mejor preparados para enfrentar la infelicidad.

Mario Vargas Llosa
La filosofía en el vestidor, El País, 21.05.06

15 comentarios:

  1. A mí también me ha gustado y comparto mucho de lo que Marito dice en su "Filosofia en el Vestidor". Destacaría, además de la que tu ya has señalado, otra frase que me ha llamado igualmente la atención: "los buenos libros son, además del mejor entretenimiento, una fuente incomparable de placer, un alimento gracias al cual la vida cotidiana, aun en sus manifestaciones más pedestres y rutinarias, puede ser mejor y vivida con más entereza y lucidez". Educación y cultura como fuente de salud, vida,etc.

    ResponderEliminar
  2. Desde luego, otra frase que me parece redonda y que suscribo (ya me gustaría, suscribirla).

    Me alegro de verte por aquí, Gwydir.

    ResponderEliminar
  3. ¿Desembrutecen, quizá? Aunque puede significar exactamente lo mismo (pero con una especial referencia a los cuadrúpedos, parece ser).

    Pero bueno, el aburrimiento es lo que tiene...

    Besos, besos.

    ResponderEliminar
  4. Lo siento, no estoy de acuerdo;la razón puede ser que Vargas Llosa, no me gusta.
    De las personas que más he aprendido, las de mayor sensibilidad, han sido personas que no tenían acceso a esa cultura.
    Saludos
    Luna

    ResponderEliminar
  5. A lo mejor te interesa leer lo que tengo enlazado en el texto, Luna.
    Es un tema interminable, el de las virtudes de la cultura, me temo.

    Yo (si no, no lo habría copiado, claro) sí estoy de acuerdo. Con varios millones de excepciones.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  6. Evidentemente, Porto, estoy de acuerdo con la cultura ¡como no!aunque creo que una persona, puede ser culta y bruta, en la misma medida.
    Prefiero pensar que la cultura Humaniza a la persona - con millones de excepciones -
    Escribo desde el trabajo y no puedo leer todo lo que me gustaría.

    ResponderEliminar
  7. Bienvenida, mujer (suena raro, esto).

    ResponderEliminar
  8. ¿De verdad suena raro que firme como mujer?
    Para mí, no lo es.....será que llevo miles de años, siéndolo.
    Saludos y gracias por tu bienvenida.
    La misma

    ResponderEliminar
  9. Me parece menos raro que alguien se presente como "mujer" que lo de hablar de algo y llamarle "cultura". Creo que es una abstracción aún más grande. Luna plantea algo interesante, y Mario, que es un escritor fantástico, se queda en su lado de la palabra y se cae de la mitad de un mundo que tiene más culturas que la de la cultura. Tal vez la mejor mitad del cielo esté sin escribir, y tal vez lo culto nos traiga la nausea de alejarnos de una tierra que nos necesita, que necesitamos.

    Hablo de náusea. Hablaba Leonard Bernstein de la evolución de la música jazz desde su vertiente más rítmica y trivial a un mayor acercamiento a la música culta, mediante la aportación de Miles Davis en el nacimiento de la era cool, la composición modal y la improvisación cerebral basada en escalas complejas...

    ... dí un respingo cuando le oí decir "música culta", en contraposición a todo lo demás. Música culta... y un candomblé no es culto, o la danza de un derviche, o el retumbar del wadaiko, un raga, el be-bop, los sones de la nickelarp noruega, ... eso no es culto. No son cultos Roberto Goyeneche o Ravii Shankar, Ornette Coleman ni Paniagua... ¿¿porqué?? A qué llamáis cultura.

    ResponderEliminar
  10. Perdona, Balcius, pero si he dado la impresión, al reproducir este fragmento de artículo, de que algo como lo que Luna ha dicho me parece un sinsentido, la impresión es falsa.
    Sobre este tema se había hablado mucho aquí, en los dos posts enlazados en el texto. Ahí quizá encuentres una idea más matizada de lo que yo y otros entendemos por cultura (y que, ya te adelanto, es algo bastante más amplio y complejo que leer filosofía y escuchar a, por ejemplo, Alban Berg).

    Un abrazo.

    Ah, ¿y quién ha dicho que firmar como Mujer me pareciese una abstracción?

    ResponderEliminar
  11. Creo que fotografiar la fealdad que a veces me rodea, en cierta manera la neutraliza.

    ResponderEliminar
  12. Yo creo que más que neutralizarla la acerca y nos quita el miedo inconsciente.
    Puede ser.

    En la línea de los comentarios de mi penúltimo post.

    ResponderEliminar
  13. Puede que sea una tontería, también, claro :-)

    ResponderEliminar
  14. Si tuviera que hacer una consideración, como tú sueles hacer, sólo haría una: no estoy seguro de casi nada. Como he dicho antes, mi entorno físico inmediato es anodino, y no es, para mí, algo secundario. Cuando comprendí que mi relación con el mundo cotidiano que me rodeaba era algo importante y debía ser satisfactoria a pesar de todo, estuve dándole vueltas hasta que llegué a la conclusión de que hacer fotos era una manera de ordenar el mundo, de vivir. Hacer fotos de cosas bellas es agradable, pero también existen las feas, que no siempre son inexpresivas. A veces las paredes hablan, como en la fotografía de ayer de la señora con el perrito. Creo que hacer fotografías me ayuda a vivir mejor y más consciente, no solo a sobrevivir, una vez que he visto que, probablemente, viviré rodeado de este paisaje la mayor parte de mi vida, espacios anodinos. Si quiero hacer fotos que al menos sean correctas debo mirar con atención e intención todo, no solo lo bonito, pensar qué quiero decir y cómo, y también debo dar una opinión visual. Puedo intentar convertir el mundo en fotografías, en buenas fotografías, visualmente potentes, emocionalmente expresivas, intelectualmente adultas, aunque sea un aficionado. Y después de todo eso puedo mirar dentro de mí y hacer un ejercicio de introspección e intentar fotografiar lo íntimo y privado, o sea, lo personal. Creo que mucho de lo que digo es aplicable también a escribir, escribir literatura en serio, quiero decir. Quizás también lo negativo, el pesimismo, lo angustioso o lo asfixiante, la angustia de vivir, eso que tú ves en algunas fotografías, a partir de cierto punto deja de ser creativo y ocupa toda la mirada. Creo que hay que saber en qué punto ocurre eso.
    Luego está la música, pero esa es otra historia. Ya disculparás la extensión, me cuesta condensar.

    Un abrazo, Fernando

    ResponderEliminar
  15. Son un lujo, comentarios como este, José Luis.

    ResponderEliminar