Kant está sobrevalorado
Yo, todas las mañanas, sé exactamente si voy justo a la hora, me adelanto o me retraso, por la altura a la que me cruzo con una señora que sube andando de su casa a no sé dónde.
- ¿Y a usted, si le concediesen todo cuanto deseara, qué le gustaría hacer en sus vacaciones? - ¿A mí? Estar sentado en una silla.
Yo, todas las mañanas, sé exactamente si voy justo a la hora, me adelanto o me retraso, por la altura a la que me cruzo con una señora que sube andando de su casa a no sé dónde.
Escrito por Portarosa , 15:01
Ja, ja, ja, a ella le pasa lo mismo contigo.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo a los dos
¡Qué va, ni me mira! Va ensimismada, debe de ser filósofa...
ResponderEliminarOtro para ti.
Según esa teoría yo también soy filósofa porque voy siempre en mi mundo...jajaja.
ResponderEliminarAlgunas personas desarrollan una disciplina cronometizada y otras nos guiamos por ellas ; no sabría decir qué es mejor.
B.
Por supuesto que a ella le pasa lo mismo. Te parece que no te mira pero lo hace. A mí también me ocurre algo parecido cada mañana. A veces a la mujer que sube la cuesta se le añade el bus nº 72 en la curva, y el adolescente con el pelo-cenicero que baja corriendo... Total, que esta especie de coreografía conjunta (en la que me incluyo) consigue una precisión temporal que ni el Big Ben.
ResponderEliminar