19.4.12

Marsé ahora

Hace poco les conté mi tardío primer contacto con Marsé, con La oscura historia de la prima Montse, y cómo me deslumbró.

Inmediatamente después leí Encerrados con un solo juguete (que recuerdo ver en la mesilla de mi madre, cuando yo era pequeño, durante años, aunque serían meses o semanas), y también me encantó. Tal vez no me gustó tanto, pero me gustó mucho.

Pero la semana pasada empecé su última novela, Caligrafía de sueños, y la he dejado en la página 70 (y he empezado Una historia de amor y oscuridad, de Amos Oz). Pensé si cambiaría, si debía darle un voto de confianza y seguir un poco más, pero la estuve ojeando y me pareció que era más o menos siempre lo mismo.

¿Qué no me ha gustado? Pues (y perdonen la osadía, y sobre todo que me la perdone él si alguna vez esta crítica llega a su conocimiento) que sobraban muchas cosas; que lo que en las otras dos novelas eran descripciones, diálogos, reflexiones, etc., con sentido, siempre necesarias, que nunca estaban por estar, aquí he visto (en estas pocas páginas, y creo que desde la primera) adornos gratuitos, vueltas injustificadas, exhibición. Está todo muy bien escrito, por supuesto, pero me da la sensación de que lo ha escrito... Bueno, nada, mejor no lo digo que 70 páginas son pocas.

Son habituales las obras tardías flojas, más cómodas, o incluso mediocres de escritores consagrados (creo que el peor libro que he acabado fue La muerte del decano, de Torrente Ballester, que está entre mis escritores españoles favoritos). Supongo que casi siempre por razones económicas. No sé si estamos ante una de ellas, pero, en cualquier caso, parece que para todo gran escritor (y en mi opinión Marsé sin duda lo es; y pienso leer el resto de sus primeros libros) es difícil sortear los riesgos del éxito.



9 comentarios:

  1. Un año después de habérmelo leído -no me entusiasmó para nada- me doy cuenta que hay escenas, personajes y esa calle de Barcelona que siguen vivas en mi memoria. Eso significa algo, creo.

    ResponderEliminar
  2. ¡Hola, Aroa!
    Sí, seguro que sí.
    Aunque supongo que si leo el resto de los del principio me sucederá algo parecido.

    Por cierto, he leído que has conocido a Moli, ¿no? ¡Qué casualidad!

    Un beso.

    ResponderEliminar
  3. Yo leí algo de Marsé en su momento pero lo tengo completamente olvidado.

    Entro para comentar sin que tenga nada que ver, al más puro estilo NáN...Que yo ya sabía que tú ( Porto) eras amigo de Aroa..pero ya comentar más el otro dia en la editorial me pareció excesivo, era todo como una peli de Woody Allen...XD.

    Ah..y entraba también a decir que a mi el de Oz..me gustó muchísimo. A ver si hay suerte y te gusta.

    ResponderEliminar
  4. También fue ése el primer libro de Marsé que leí. Y también me gustó mucho.

    ¿Éxito, o problemas de inspiración? ¿Es posible que cada persona tenga dentro un número finito de relatos, como puede que los músicos lo tengan de canciones y, a partir de ahí, sigan escribiendo (y componiendo) por inercia, pero sin nada que decir, o que cantar?

    Qué lástima, amigo Portorosa, que nos separen tantos cientos (y cientos) de kilómetros, porque el tema da para unas buenas cervecitas.

    ResponderEliminar
  5. Deberes: "Si te dicen que caí"; "Últimas tardes con Teresa"; "Un día volveré".

    Sí, escribe siempre el mismo libro... y sí, lo escribía mejor 30 años atrás.

    http://madredemarte.wordpress.com/

    ResponderEliminar
  6. Lo sé, lo sé, Madre, y los haré (Un día volveré no lo conocía. ¿Y La muchacha de las bragas de oro, que de pequeño me atraía como un imán, por razones obvias, desde la estantería de mi padre?).

    Moli, a ver si hacemos algo más corpóreos esos encuentros, de una vez.

    Nacho, yo también lo he pensado: que o escribimos ensayos sobre temática diversa, previo estudio, o tenemos solo unas cuantas cosas que decir, ¿no? Damos, o dan, con su obra, su visión de la vida; y punto, ya está, ya la han dado. No sé, lo mismo es una chorrada. Pero sí que daba para unas cervezas. ¡En Plaza Mina, por favor!

    Besos y abrazos.

    ResponderEliminar
  7. Recuerdo haber leído este libro, pero no recuerdo qué me pareció; así que seguramente no me entusiasmó...

    http://madredemarte.wordpress.com/

    ResponderEliminar
  8. A mí me gustó, pero tienes que conocer el final, creo que te cambiaría la opinión.

    Cuando ya crees que has entendido todo, te sorprende.

    ResponderEliminar
  9. Puede ser, BLN; lo que pasa es que desde el principio me pareció otra cosa, distinta a sus otros libros.
    Me daba la sensación de que había cosas bien escritas pero que se regodeaban demasiado en el estilo; como si fuesen ejercicios sin demasiado sentido, un poco pensados para rellenar páginas. No sé, puedo estar equivocado, pero me dio esa impresión, esa impresión de "no necesidad", inexistenten en los otros dos títulos que le he leído, y se me quitaron las ganas de seguir.

    Un saludo.

    ResponderEliminar