40 años
Escribo desde la cama. Son las doce y media de la noche, así que es ya día 31. 31 de mayo. Es decir, que estoy de cumpleaños.
Hoy cumplo cuarenta años.
Cuarenta años.
Dios mío...
Probablemente no haya edad más cargada de trascendencia, ninguna que se relacione tanto con el cambio, con el paso de una etapa a otra: uno se hace, inexcusablemente ya, mayor.
Lo paradójico, lo desconcertante, es que me siento el mismo. Me parece que es aquel niño que sigo siendo el que cumple cuarenta.
Yo, la crisis, una crisis personal profunda que lo abarcó todo, la empecé hace tres años, cuando me separé. Y quiero creer que para mí este cumpleaños representa su fin.
Este fin de semana he intentado celebrarlo con algunas de las personas que más me importan. La distancia ha hecho que no hayan estado todos los que me hubiera gustado, pero aun así me sentí muy acompañado y muy querido. Y como les dije a algunos de ellos, me miro, miro mi vida y me gusta. Me gusta cómo estoy, me siento bien y creo que todos los esfuerzos de los últimos años han valido la pena.
Todavía hay problemas, pero creo que poco a poco van solucionándose. Otras cosas ya nunca serán como me gustaría, y es el precio que debo pagar. He hecho daño, y no hay nada que sienta más. Y sigo teniendo miedos. Pero en general me siento cada vez mejor conmigo mismo, estoy contento con mi vida y creo que paso a paso voy logrando que en ella haya solo cosas que quiero.
Empiezo, pues, una nueva etapa, una nueva edad. Y lo hago conociéndome poco pero mejor que nunca, convencido de mis posibilidades y teniendo claro que las cosas, en buena parte, dependen de mí, que en mi mano está hacer que sumen o resten.
¿La vida comienza a los cuarenta? No, por supuesto que no. Soy lo que he vivido. Pero lo que me queda, como dice la frase, comienza hoy, y voy a intentar hacer todo lo posible por que sea maravilloso.
Y con respecto a vosotros, a los que he conocido gracias a este blog y con quienes, personal o virtualmente, ya tengo una amistad, solo puedo deciros que formáis parte de esa vida y le aportáis mucho. Muchísimo, sinceramente.
Muchas gracias, muchos besos y muchos abrazos a todos.
Muchas felicidades, Porto. Haber pasado la famosa crisis de manera paulatina en los últimos tres años es una ventaja, hay gente que se lo toma fatal, aunque a mí me parece más una muestra de inseguridad, de no estar contento con uno mismo que se viene arrastrando de lejos, y que la fecha sólo saca a la luz. Que seas consciente de la importancia de tu propia voluntad en lo que ocurra a partir de ahora, de que el control (salvando lo incontrolable, claro está) es tuyo, dice mucho de ti. Yo pasé los cuarenta hace ya tres años, y tampoco fue un momento traumático para mí. Eso sí, me pareció increíble lo joven que me seguía (y sigo) sintiendo y lo mayor que me parecía mi madre a esa edad.
ResponderEliminarUn placer formar parte de tu día a día, aunque sólo sea un poquito...
FELICIDADES, Porto. Y que sean otros cuarenta (por lo menos).
ResponderEliminar(Qué raro, esperaba una verificación de palabra tipo "fourty").
Pues muchas felicidades, señor, que cumpla muchos más y que nosotros lo leamos.
ResponderEliminarSaludos desde la irónica realidad.
Hombre, Porto, a partir de esta edad no se hace más que mejorar, se lo digo en serio, si se va tomando conciencia de la vida.
ResponderEliminarMás sabe el diablo por viejo que por diablo. Pero todavía está en los principios... ¡Ni se le puede llamar viejo, cachis!
Eso sí, los chavales le hablarán de usted.
Así que yo empezaré a tutearte, como compensación.
Un abrazo, chaval.
Te lo he dado en mi casa y te lo doy también y sobre todo en la tuya: un abrazo muy muy fuerte, querido Porto, de todo corazón.
ResponderEliminarAinss...todo tiene muy buena pinta mirando hacia delante desde hoy, la verdad.
ResponderEliminarQue lo disfrute!.
Bicos.
LLS.
El día de mi cumpleaños mi amiga Berna Wang me regaló un texto de Martín Garzo que ahora yo te regalo a ti (y a todos los que te leen, claro). Espero que te guste. Se titula Lo suave y lo bueno, a mí me emocionó. Otro abrazo.
ResponderEliminarClaro que sigues siendo un niño. Tienes la misma sonrisa. Y eso es bueno. Muy bueno.
ResponderEliminarStay foolish.
Me he emocionao con tu post. Ayns. Felicidades.
Felicidades, chaval, que estás hecho un chaval. :-)
ResponderEliminarUn abrazo,
X.
Felicidades!! Ha sido un placer acompañarte en tu crisis y -ojalá- celebrar que toque a su fin. Veo las crisis como saltos hacia adelante que uno es capaz de dar gracias al impulso de su gente. Siempre te he sentido bien rodeado y me alegro.
ResponderEliminarUn beso.
Muchas felicidades, Porto! Me alegro de que estés contento con lo que eres ahora.
ResponderEliminarUn beso muy grande.
felicidades
ResponderEliminarsí, dicen que es edad de cambio, punto de inflexión y cosas así.
espero que seas la excepción que confirme la regla.
una duda: si hoy era tu cumpleaños ¿qué era lo que estábamos celebrando el otro día en tu casa?
Felicidades y un abrazo fuerte.
ResponderEliminarFelicidades, Porto!!
ResponderEliminarNadie diría que has llegado ya a tan provecta edad :P
Porque, como dice Xavié, estás hecho un chaval...
Hala, a disfrutar.
Un abrazo.
Felicidades Porto.
ResponderEliminarLa crisis que te viene ahora es la de viejo verde, mirar a las mujeres,... Que raro, ¿por qué dirán que esa crisis empieza a los cuarenta?
Ya han pasado unos años desde que cumplí los cuarenta y no me he hecho más sabio, y tú sabes que en mi caso lo tenía muy fácil (el listón está muy bajo).
Un abrazo y felicidades cuarentón.
Desde las nueve
ResponderEliminar-----
Doce y media. Rápidamente el tiempo
pasó desde las nueve, cuando encendí mi lámpara
y me senté aquí. Estoy sentado
sin hablar o leer. ¿A quién podría hablar
en la casa desierta?
La imagen de mi cuerpo joven,
cuando encendí mi lámpara a las nueve,
vino a mi encuentro despertando
un perfume de cámaras cerradas
y pasado placer. ¡Qué audaz placer!
También trajo a mis ojos
calles ahora no reconocibles,
lugares de otro tiempo donde la vida ardió,
viejos teatros o cafés difuntos.
La imagen de mi cuerpo joven vino
y me trajo también memorias tristes:
las penas familiares, los adioses,
los sentimientos de los míos,
los sentimientos de los muertos
apenas atendidos.
Doce y media. Cómo pasan las horas.
Doce y media. Cómo pasan los años.
Cavafis
te deje mi saludo en el post anterior, pero bueno si ya viste y recojiste tu regalo en mi blog, sabes que te deseo lo mejor de este mundo y que sigas cumpliendo mas...y NO olvides...sigue escribiendo
ResponderEliminarbesazos
Hola
ResponderEliminarVengo del blog de Hitlodeo. Es que he visto ese 40 en su sidebar y me he dicho "Tate, aquí hay un cumpleaños" :D
Muchas felicidades, caballero de la silla.
Me he sentido muy identificado en muchas de las cosas que has dicho porque son las mismas que sentí cuando los cumplí yo.
No lo dudes , aún nos queda por vivir lo mejor, sin miedos; eso sí, sin perder de vista al niño de dentro.
Un abrazo
PD. Yo el domingo que viene, 44.
Teresa (claro, la fecha solo nos sirve de alerta: su simbolismo nos hace mirar y extraer conclusiones), Riley (qué menos), Irónico (ojalá, ambas cosas), NáN (eres un buen ejemplo de eso que dices, así que me lo creeré), Jesús (gracias, a mí también me ha encantado), LLS (pues miremos para ahí, ¿no?), Last (qué alegría oír eso), Xavie (mi querido primer amigo de los blogs), Princesa (lo estoy, lo estoy), Carol (es importante), Anónim¿a? (el cumpleaños, el cumpleaños; es que en lunes...), Juan, Conde (provecta, eso es; a ver cuánto puedo seguir disimulando), Hit (aquí donde lo leen, el mejor compañero de trabajo que he tenido jamás; y sabio), Sirwood (me gusta mucho; de cuántas formas se puede ver el paso del tiempo), Rociolat (ya sabes que lo recogí; por ahora sigo, cómo voy a perderos) y JuanRa (bienvenido, y felicidades por adelantado; sin miedos):
ResponderEliminarmuchísimas gracias, de todo corazón.
Y sí, Jesús, para mí el final, tras la cita de Benn, es emocionante.
ResponderEliminarPreguntarse de dónde sale, a pesar de todo, en medio de todo lo que vemos, desolador, lo suave y lo bueno de la vida, del mundo, de las personas.
Me recuerda a ti, a lo que escribes.
Gracias.
Muchísimas felicidades señor Chindasvinto.
ResponderEliminarUn beso muy grande y emocionado. Y emocionado de verdad que una está cada vez más blandita....que se le va a hacer, son cosas de la edad...........jajajajajajajajajaja.
Mamen.
MUCHAS FELICIDADES PRIMO!!!! MUAAAAAAAACK
ResponderEliminarPorto:
ResponderEliminarquería enviarte algo más personal y a través de correo electrónico, pero, as usual, se me ha echado el tiempo encima y coñe, que me he dado cuenta que no sé de ti (vosotros) -salvo por el blog- desde navidades porque fue en navidad cuando me petó el ordenador y todavía no tengo en la nueva agenda tu email. :-)
Así que vengo al blog, como todos los años, a decirte ¡Felicidades! Pero de todo corazón. Mi tía Mari siempre dice que ella se ha sentido más plena que nunca con cuarenta. A ver si es verdad.
Besos a puñados.
Calamity.
Creo que no hay mejor regalo de cumpleaños que saberse dueño de uno mismo.
ResponderEliminarMuchas felicidades y enhorabuena por estar en ello¡ ;-)
Gracias, Mamen, muchas gracias.
ResponderEliminar¿Será cosa de la edad haber llegado a que además de prima seas amiga?
(Ay, siempre me pregunto por qué dejaron de llamarme así, Chindas, con lo bonito que era. )
Gracias, MyT, prima "cercana". Otro beso para ti.
ResponderEliminarGracias, Kaken.
ResponderEliminarCreo que eso es de lo más crucial que estoy aprendiendo.
Un beso.
Cal, tenemos que hablar in-me-día-ta-men-te.
ResponderEliminarMuchas gracias, muchas gracias, mi primera amiga de los blogs y primera persona virtual que se "hizo carne".
Un beso.
FELICIDADES...
ResponderEliminarCreo que llego a tiempo ( yo aún no me acostado, así que técnicamente para mí sigue siendo día 31...)
Me gusta lo que has escrito. Sentirse a gusto con uno mismo. Con las decisiones (internas o sobrevenidas) que nos han traido a este presente.
Hacer lo que uno quiere, tener a la gente que quiere en su vida.
Será la madurez.
Los cumpleaños hay que celebrarlos. Siempre. Porque seguir vivo un año más es motivo de fiesta.
Un besote
Claro, ETDN, llegas a tiempo. Y claro que es motivo de celebración, por supuesto.
ResponderEliminarEsa diferencia me la enseñaron este año, precisamente: tener todo lo que uno quiere es difícil o imposible; lo que hay que intentar es tener solo lo que se quiere.
Un beso. Y gracias.
Llego tarde pero me encantan los cumples. Feliz post cumpleaños.
ResponderEliminarYo tengo justo la edad de tu crisis...y espero haber superado la mía para cuando cumpla 40.
Felicidades otra vez.
Todo es ponerse, Molinos :)
ResponderEliminarMuchas gracias.
¿ No llego un poco tarde para felicitarte?
ResponderEliminarEs una edad preciosa. Sé feliz. Lo mereces.
Un beso
Nada tarde, Lunita.
ResponderEliminarGracias, muchísimas gracias :)
Un beso.
Felicidades desde el submundo.
ResponderEliminarMuchas gracias, desde aquí arriba.
ResponderEliminarFelicidades, P, muchas.
ResponderEliminarSe te ve así como cuentas: bien, muy bien, espero que estés disfrutando de estos primeros días.
Ya hablaremos de Brasil la próxima vez que vengas, espero que pronto.
Un abrazo
Me encantaría, Lara.
ResponderEliminarMuchas gracias. Un beso.
Muchas felicidades, Maestro. Cuídeseme (le llevo dos años de ventaja, y no se cambia tanto, no se crea).
ResponderEliminarGracias, Micro, gracias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cuarenta años, cuarenta comentarios. Con el mío,41.
ResponderEliminarSi siempre pudiéramos ver las rupturas como necesarias para ampliar la consciencia, en lugar de sufrirlas las agradeceríamos mucho antes.
Entraste en la década más hermosa, con la madurez ya en el espíritu, y con la belleza aún en el cuerpo.
"Entraste en la década más hermosa, con la madurez ya en el espíritu, y con la belleza aún en el cuerpo."
ResponderEliminarO sea...¡Te estás haciendo viejo, macho!
S.
¡Amanda, cuánto tiempo, y qué alegría!
ResponderEliminarGracias.
A Sirwood, ni caso... yo.
Portorosa, está usted hecho un chaval, pero como siga todo el rato sentado en la silla se le va a poner el culo como a Falete. Está en edad de cuidarse y hacer ejercicio.
ResponderEliminarNo obstante, ya le digo desde aquí que cómo me gustaría llegar a su edad así como está usted.
Recuerde siempre una cosa. El varón a eso de los cuarenta disfruta de un hermoso canto del cisne. Bien es cierto que las erecciones pueden llegar a ser menos llamativas, pero el buen Dios le da un don al varón que es que un músculo que hay justo encima del pene se le atrofia, se vuelve menos elástico, y así, aunque sea por otras razones, podemos disfrutar de erecciones bien llamativas. Ya no es cosa de la sangre, es más bien del músculo atrofiado, que se convierte en una especie de corteza securria (¿sabe esas cortezas secas que venden en las tiendas de frutos secos para freír?) que impele el miembro hacia el cielo. ¿No le parece hermoso?
Feliz cumpleaños, aunque llegue tarde. Un abrazo.
Qué cab... Gracias, gracias, señor Sonfor.
ResponderEliminarYa, ya vi en los consejos a su hipotético hijo que le preocupa a usted la alimentación y el cuidarse. No se preocupe por mí, que hago deporte y como bien. Un día les pongo una foto y ven lo bárbaro que estoy.
Sobre lo otro, yo siempre he creído (será la edad, también) que el problema es no querer, no no poder. O sea, justo lo contrario de lo que se suele tratar.
Buenos días y buena semana a todos.
(Risas)
ResponderEliminarHay que ver, Sr. de Portorosa, lo que disfruta usted de su cumpleaños...
ResponderEliminar¿Es que quiere llegar a los 50 (comentarios)?
Salud :-)
Ya, eso parece, Susana.
ResponderEliminarPero no, que ayer casi puse algo; lo que ocurrió es que al final no me convencía nada. A ver si hoy...
Muchas felicidades. Es un cumpleaños especial, sin duda, casi como para levantarse un poco de la silla y dar una vuelta al ruedo.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Hombre, Miguel, tu visita es un gran regalo!
ResponderEliminarMe alegro mucho de verte.
Muchas gracias.