24.1.12

¿Qué es una internet libre?

Yo, supongo que como casi todos ustedes, usuarios de la red y familiarizados con sus posibilidades, considero crucial que internet siga siendo el espacio de libre acceso y libre intercambio de conocimiento e información que es.

Si internet se convierte en un medio de un solo sentido y con menú cerrado como los demás, si poco a poco va siendo limitada y censurada, si la tendencia a controlarla (por los gobiernos, pero no solo por ellos) se impone, habrá supuesto de todos modos una auténtica revolución en las comunicaciones, y probablemente seguirá siendo siempre una herramienta útil, pero no llegará nunca a jugar el relevante papel social, cultural y político que en mi opinión es posible y deseable imaginarle.

Creo, por tanto, que es necesario preservar su libertad. Y que, como de costumbre, para eso tendremos que estar atentos nosotros, los más interesados en ella.


Pero también creo que todo eso no puede ser la excusa demagógica que justifique cualquier uso.

Yo... me llamo Portorosa y usaba Megaupload.

Megaupload, Series y Pelis Yonkis y todo eso. Quién no.

Y sin embargo me parece bastante lógico que los cierren.

Desconozco si leyes como las famosas SOPA y PIPA son algo contra lo que luchar, aunque supongo que, al menos en parte, sí. Sé que en Megaupload había más cosas que películas piratas (aunque imagino que eran despreciables en volumen). Sé que los ingresos de las cinematográficas y de las productoras dependen de muchas más cosas que de las recaudaciones en los cines; e incluso me creo eso de que, para algunos productos, a veces la distribución gratuita se traduce en más beneficios. Creo que no tiene demasiado sentido no permitir ver gratuitamente una serie o una película que ya han emitido en televisión y que por tanto se ha podido grabar. Etc. Y sobre todo tengo muy claro que la forma de distribuir cine, como la de vender libros y la de casi todo, tiene que cambiar ya y lo hará, porque los canales e intermediarios de antes ya no son necesarios ni suficientes. Y eso hará que funciones y trabajos actuales dejen de existir, o casi; como los copistas por culpa de Gutenberg.

Pero me parece evidente que uno no puede ver gratis una película recién estrenada. Como no puede leer gratis un libro recién publicado. O sí, a lo mejor sí puede, pero con consentimiento, y de un modo que garantice que el autor y el resto de los que hacen posible la obra cobren por su trabajo.

Copiar una película en un cine y subirla a internet no es libertad. Piratear un archivo epub y repartir una novela gratuitamente, haciendo que ya no tenga sentido comprarla, no es libertad. O no es hacer un buen uso de ella, creo yo.

Yo me beneficiaba de la situación. Pueden llamarme inconsecuente, pero es demasiado tentador tener esa posibilidad y autoimponerse pagar. Y sin embargo creo que no es sostenible ni defendible. No al menos en esos términos.


Vean en cambio la página que cité en el post anterior: Filmin. Hay más, pero yo solo conozco esta. Se define como una página de cine independiente y de autor; y bueno, no será una descripción exacta pero da una idea de qué se puede, y qué no se puede, encontrar en ella.

Tiene una página atractiva y muy bien organizada, que admite varios criterios de búsqueda, algunos tan curiosos como "Qué te apetece ahora" (entender la actualidad, comer una hamburguesa, algo raro, raro, raro, un poco de dulce, no quedarme dormido, cine para días de lluvia, recordar a mi ex pareja, etc.). No hay millones de títulos, pero creo que sí mil o dos mil. Y uno paga por peli (1,95 o 2,95 €, depende, y tiene 72 horas para verla desde que empieza, y en ese tiempo puede verla cuantas veces quiera), o paga por mes, o alguna modalidad más. Las películas tiene la calidad original, claro, y se pueden ver en v.o. o dobladas. También tienen series.

¿No parece que más o menos por ahí deberían ir los tiros?


Será difícil lograr un equilibrio entre esa libertad en la red que consideramos irrenunciable y la protección de ciertos derechos. Pero algo habrá que hacer, porque la opción de confiar en la responsabilidad individual de cada uno, en esto como en todo, no parece ofrecer muchas garantías.

16 comentarios:

  1. Yo... me llamo David y usaba Megaupload, pero vamos, que de pascuas a ramos: yo era más de mezclarlo con el Torrent, la droga dura (cosa que, por cierto, sigo haciendo y va a ser más complicado parar), y con una filosofía radicalmente distinta. En lugar de un sitio donde centralizar las descargas y forrarse a base de publicidad y cuentas premium, gente compartiendo y, como mucho, un par de banners en el sitio de donde obtengas el link.

    En fin, que yo me confieso culpable de descargar.

    Sin embargo y estimando a ojo de buen cubero, como el 80% de las películas que descargo las he visto en el cine o (cada vez más) las tenía en un DVD que se ha perdido, o que se ha rallado, sobre todo.

    Porque yo creo que esta cuestión tiene dos lados, dos banquillos. En uno está la industria, que quiere pasta, y en el otro, los usuarios, que, puestos a elegir, somos capaces de ver que 10€ que no te gastas son 10€ más que tienes.

    Empiezo por nosotros: yo creo que, como todo, hay que hacer un uso responsable de Internet. Por ejemplo a mí me has convencido con lo que llevas contado de Filmin y definitivamente voy a probarlo, porque me parece un buen precio: es barato, dará beneficios a quien haya hecho la peli o la serie (¿no?) y, puesto que si quiero palomitas me tocará hacerlas, sabré encontrar mi sitio en el sofá y si se caen las palomitas me tocará barrerlas a mí, y por tanto sí que estoy dispuesto a pagar 2 o 3 euros por una película de la que no hay que hacer copias, a la que no hay que transportar y de la que no dependen los sueldos de taquilleros, acomodadores y barrenderos (y lo siento mucho por ellos, pero es lo que hay, y volveré al cine, porque me gusta). Lo contrario que pasa con el libro electrónico, que te lo cobran por lo que vale el de papel (casi pongo "el de verdad": mira lo que opina mi subconsciente...), y tienen la desvergüenza de decir que es para protejer a los libreros, poniendo a precios parecidos lo que venden estos últimos con un libro electrónico del que sacan un margen de beneficios descomunal, con la subida.

    Y no creo ser un tipo demasiado raro, con todo esto. Vamos, que a mí, ya digo, me ha gustado siempre ir al cine, pero también, de siempre, incluso en los tiempos pre-internet e incluso pre-Megaupload, he conocido a gente que practicaba la filosofía del "¿para qué diablos voy yo a ir al cine si ya ponen pelis en la tele?"

    Hay gente, simplemente, que no está interesada en algo como para pagarlo, y yo creo que la lucha contra la piratería tiene, en el fondo, a esa gente en el punto de mira, cuando lo único que van a conseguir es que dejen de bajarse Glee de internet para ver El Barco por la tele y, potencialmente, perder un montón de clientes a los que las descargas pueden descubrir un mundo nuevo.

    No sé, yo por ejemplo, antes de leerlo aquí, apenas sabía nada de esto de Filmin, y ha sido verlo y ver que, por ejemplo, tiene pinta de que podremos ver Mad Men a 2€ por capítulo, y pensar que es algo cojonudo.

    Pero (cambiemos el foco del banquillo) lo que quiere la industria es vetar que los archivos con copyright vuelen por ahí libremente, y eso es trágico, no por la actualidad, pues series y estrenos, vía Filmin o vía Torrent (por las buenas o por las malas, se podría decir), seguiremos viendo, sino, pienso yo, porque Internet estaba montándose como un tremendo cajón de sastre en el que, si te daba por ahí, podías ver el primer capítulo de Fraggle Rock o de Ranma, series que no sé yo lo fácil que serán de encontrar en las tiendas a día de hoy. A mí eso es lo que me da más pena ver recortado. Que uno ya no pueda bajarse todas las películas de tal actor clásico y verlas del tirón. Que, como bien dices, algo que ya han echado por la tele y que uno podía copiarse (y sólo porque, supongo visto lo visto, no lo podía copiar) sea imposible de encontrar.

    Pero vamos, que yo me refugio en mi optimismo enfermizo y pienso que ya habrá forma de encontrarlo y que Internet es un terreno en el que, con un mínimo de esfuerzo, uno puede hacer lo que le de la real gana.

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  2. Hola, me llamo Jesús y yo también descargaba películas de Megaupload sabiendo que estaba mal (por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa).

    Compañero Portorosa, comparto y me reconozco en tus declaraciones, así como en las de David. También cuando discriminas entre los últimos estrenos y otras películas y documentales ya amortizados y condenados al olvido por las propias cinematográficas. En este sentido, el de la búsqueda de películas imposibles de encontrar en las tiendas, internet era, hasta ahora, una biblioteca maravillosa. Ojalá lo siga siendo.

    Y mira, si ya no podemos ver en nuestros ordenadores la última de Spielberg prácticamente antes de que la estrenen, pues oye, tampoco pasa nada, pero que no vuelvan a sepultar obras que, de no ser por internet, ya nadie hubiera vuelto a ver.

    Ah, yo tampoco conocía Filmin y es obvio que el futuro va por ahí (aunque su catálogo me ha dejado un poco frío, la verdad).

    Un abrazo.

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  3. Es curioso, antes de leer tu entrada había escrito lo siguiente:


    Megaupload

    Supuestamente, he visto series gratis a través de Megaupload. Que quizás lo haya hecho no significa que me parezca justo. No sólo me parece ilegal su existencia, sino incluso inmoral. Y si me he beneficiado de ello, soy consciente de que no he actuado correctamente.

    Por ello me parece increíble que la gente, no sólo lamente que la hayan cerrado, sino que incluso lo vean un atropello.

    La piratería es y debe ser un delito. Los que viven de la música, la TV o el cine tienen derecho a recibir una compensación por su trabajo y los empresarios que arriesgan su dinero para que esto siga siendo posible, tienen derecho a obtener beneficios. No me vale el argumento manido de que algunos músicos, directores o actores sean millonarios. La mayoría de los que destacan en cualquier profesión lo son. Y me parece muy bien que así sea.

    Tampoco me vale que la SGAE sean otros piratas, que lo son. No estoy de acuerdo con el “Si tú delinques yo tengo derecho a delinquir”.

    La verdad es que la mayoría de los que viven de estas artes pasan sus apuros a final de mes. Y con la piratería, a quién más daño se hace no es a los grandes sino a los pequeños. Una gran estrella, quizás en vez de ganar 20 millones gane 15 (no lo va a notar mucho). Pero uno de los cientos de operarios que se necesitan en una película se está jugando su puesto de trabajo.

    Me gustaría que quien defiende la piratería convenciera a este operario de que no va a poder trabajar por el bien común de ver películas gratis.

    O se llega a un acuerdo que satisfaga, y a la vez agravie, a todos, internautas y profesionales de estos medios, o llegará el tío Paco con las rebajas. No veo lejos que si la piratería sigue por el camino que va, se termine con las tarifas planas y se empiece a cobrar, por ley, por megas bajados.

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  4. ¡Qué me cuenta, criatura!
    ¿Que El mundo según Monsanto,
    Ese libro sacrosanto,
    No ha leído por ventura?
    Y viene con el espanto
    Del helecho y su quebranto.
    Por un menos que un cachelo,
    Un don nadie en la estribera
    Que ni está ni se le espera,
    ¿Se pone a clamar al cielo?


    Por una birriez de planta…
    Por un desliz del perito…
    Por un triste esporofito…
    ¡Por Dios y la Virgen Santa!
    ¿Tanto lloro? ¿Tanto grito?
    No lamente, no se queje
    Y tráguese la pelota.
    Si en tanto estimó el esqueje,
    ¿Por qué no dejó una nota?

    ...

    Pues el hecho
    Es que el helecho,
    —Un guripa,
    Un okupa sin derecho—,
    Perdió el lecho,
    Chincha,rabia, flipa...

    Meta tripa
    Y saque pecho.

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  5. Le dejo aquí las espinelas, que ahí abajo ya se ha pasado el arroz.

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  6. Pues yo soy (bueno era) usuaria "pasiva" de Magaupload, dado que no era yo directamente la que descargaba, pero tanto mis hijos como yo nos hemos beneficiado de sus productos.

    Gracias a ella, mis hijos han podido disfrutar de las mismas series y dibujos que sus padres, tales como "La abeja Maya", "Marco" o "Heidi"...

    Cierto es, que deberíamos de "empatizar" con las personas que directa o indirectamente trabajan para este tipo de industrias, y que a nadie nos gusta que saboteen nuestro trabajo. Yo he disfrutado (muchos años atrás) de largas sesiones de cine (salir de una sala y meterme en otra) y me encantaba, y aún hoy me sigue gustando, pero reconozco que cada día se convierte para mi en algo más prohibitivo, casi un lujo: entre la subida de precios, el aumento de familia y el recorte de mis ingresos.
    En las últimas navidades ir a ver una peli con los niños casí nos costó 50 €.

    Hoy en día quién se puede permitir esto, sino de una manera totalmente extraordinaria y excepcional.

    Cómo comprenderán sigo enganchada al Séptimo Arte, por lo que seguiré disfrutando de él, de una u otra manera.

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  7. Deivid, what a wonderful surprise!

    Bueno, pues, David y Jesús, estamos de acuerdo, parece. Lo de películas y series antiguas no disponibles o no "encontrables" (y menos en un sitio pequeño de la periferia, como este), es una pena.

    Juan, pues lo mismo, más o menos. Aunque en ese razonamiento económico no deberíamos creernos ni por un momento que las cosas (industria cinematográfica, en este caso) van a seguir igual: las circunstancias y las posibilidades son otras, y otra será la situación; como dice David, por las buenas o por las malas.

    Una de los datos hoy por hoy inadmisibles son, como dice 1730, los precios del cine. Es que eso los aboca a que solo vayan los adictos a las salas, o los padres que quieren premiar a sus hijos de vez en cuando, a costa de resquebrajar su presupuesto mensual.


    De todos modos, hoy he leído un poco más y parece que la SOPA tiene bastantes pegas, y justificaría más de un abuso.

    Sirwood, lo había leído, lo había leído, y con gran placer. Lo que ocurría es que aún no había podido comentar.
    Es usted lo máximo, como ya le he dicho alguna otra vez. Lo máximo.

    Resulta que el palabro es EXPERST. ¿Será un sarcasmo de Blogger?

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  8. Ahora le paso el móvil y se lo dice usted a mi señora. Sin más tardar.

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  9. Será un placer abrirle los ojos.

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  10. Les dejo un link de YouTube en el que explican lo que es y significaría la Ley S.O.P.A aquí.

    Dicho lo cual, me llamo Calamidad y usaba Megaupload, Rapidshare, Fileserve y todos aquellos servidores que me podían proporcionar lo que yo buscaba. La razones son muy simples (2) y ya se han comentado por aquí:
    1) Hay series (¡todo Mazinger Z y Ulises 31!) que no tendría otro modo de ver/recuperar/etc.
    2) Ahora mismo no me puedo permitir el lujo ni de ir al cine, ni de comprar un libro, ni de asistir a conciertos/teatros (que esta última industria, la teatral, está viviendo una segunda juventud), ni comprar discos...

    Muchos de mis amigos se quedaban flipados cuando a principios de mes -cuando trabajaba y cobraba más o menos para sobrevivir- iba a cualquier tienda de discos/libros/cómics y me gastaba unas cuantas perrillas. Siempre he preferido poder oler las páginas de un libro, disfrutar de un digipack y toquetear un cedé. Por supuesto prefiero miiiiiiiiiiiiiiiil veces más ir al cine que verme una peli -normalmente de poca calidad, salvo Filmin y similares- en la pantalluca del ordenata.

    ¿Saben? Cuando era estudiante universitaria la superiora del colegio mayor (de monjas) en el que me quedaba, llamó asustada a mis padres para comentarles que debía de estar enferma o algo me pasaba porque iba al cine tres o cuatro veces por semana. Claro, el cine costaba unas doscientas pesetas (1,20€), ahora cuesta ocho euros (unas 1.200 pts). ¿Se creen que no me gustaría seguir haciéndolo? Sería de tontos creer que no. Aunque den pelis por la tele (muy buen apunte de uno de los comentaristas) yo siempre preferiré ir a las salas y disfrutar de un directo in situ.

    Después del egotrip decirles que todos tenemos derecho a ganar dinero con nuestro trabajo discográficas y empresas del ocio (¡las que sean!). Pero estas últimas se están enrrocando en un sistema comercial que, señores, ¡ya no funciona! Las reglas del juego han cambiado y como tales estamos en un periodo de transición de lo antiguo a lo futuro (a lo presente, qué coño). ADAPTACIÓN. Y como no sabes por dónde les está dando el aire, con vetar internet a María Santísima y que paguen justos por pecadores, se darán por satisfechos cuando no tienen en cuenta que, por ejemplo, el pavo de Megaupload se llevará sus millones de servidores y millones de dinero a cualquier país falto de PIB y situará allí los mismos y ni ley SOPA ni leches. Lo cual no quiere decir que esta ley no nos vaya a afectar a todos porque que tire la piedra el primero que no haya utilizado un triste link para poner una canción, un video o anything con derechos de autor.

    Creo que el camino está en actuaciones como la de Filmin (en cine) o la de Spotify (en música) y en ofrecer un valor añadido al producto ofertado que no pueda ser contenido en un archivo digital. A mí por ejemplo me repelen las tablets y los chismes esos para leer libros. La razón es simple: prefiero un libro bien maquetado -bien diseñado- a un archivo word, pdf o formato x que ni cuida márgenes, ni se preocupa del interlineado, ni del interletraje ni de ná. No digamos ya los libros ilustrados: una mierda en digital.

    Bueno, me he quedado a gusto. Tal vez debería haber escrito un post en mi blog que será cerrado como el 99% de todos los blogs una vez que se aprueben leyes abusivas para favorecer el bolsillo de unos pocos, muy pocos.

    Saludos.
    Cal.

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  11. Ah, perdón. :-S La imprenta no fulminó el trabajo de los copistas. Obviamente no habían -ni hay- tantos copistas y miniaturistas como en la Alta Edad Media, pero sigue habiéndolos: se llaman calígrafos (entre los cuales tengo el gusto de estar) y tipógrafos manuales. Se siguen haciendo copias de libros como Kells o cualquiera de los Beatos y se siguen haciendo diplomas a mano. Son mucho más caros, claro, pero aún existen personas a los que le gusta la imprecisión de la tipografía manual. Para gustos, colores. Yo seguiré comprando cedés de música mientras pueda y existan.

    De nuevo: adaptación.

    Corto y cierro.

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  12. Thank you, Cal. Los comentarios de los usuarios más expertos son muy interesantes.

    ¿Cal, de calígrafa, entonces?

    Buenos días. Disfrutad de la vida.

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  13. Yesss, calígrafa de tipografía carolingia del siglo IX. ¡Más contenta con mi plumín y la nogalina haciendo astas, perfiles, colas y lágrimas! Eso sí, rica lo que se dice rica, no me voy a hacer ni yo ni ninguno de los que se dedican a esto.

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  14. yo....soy una marcianita y lo digo casi con verguenza,nunca me he bajado nada de internet.Sí me he beneficiado indirectamente como cuando mi cuñado nos puso una película que aún estaba en cartelera y en la cual se escuchaba el eco del sonido en la sala de cine.Me sentí como el día en el que mi hermana estaba mirando una cazadora baquera en el mercadillo de Collado Villalba y descubrimos una compresa en uno de los bolsillos.Y es que tenemos una responsabilidad también como consumidores ¿ No creen ?
    Para mi la libertad de uno termina cuando afecta a los derechos de otros.En este sentido dice Howard Garnerd en el libro que estoy leyendo(Verdad,Belleza y Bondad Reformuladas)respecto a cómo introducir valores éticos en los adolescentes :
    " Los protagonistas pueden señalar o dramatizar situaciones online donde los adolescentes cometan o sean víctimas de conductas poco éticas. Los jóvines pueden revisar su indiferencia con respecto a la propiedad intelectual, cuando son ellos quienes han trabajado en una creación y ven que se la usurpan en Yor Tube sin el menor reconocimiento."
    No obstante, estoy de acuendo en que no es lo mismo un estreno que algo ya " amortizado ";que el cine es muy caro , que la música también lo es etc.Encontremos pues un punto de encuentro la industria y los usuarios . Utilicemos y potenciemos páginas como filmin porque ,estoy de acuerdo , ahí está el futuro.
    De todas formas les diré que llevo dos fines de semana viendo películas de forma legal y GRATIS.Me he ido a la biblioteca municipal.Ya sé que la oferta no se puede comparar, es más incómodo etc ; pero ahí está.Lo sé , tengo debilidad por las cosas en extinción : Animales,plantas...,cines,bibliotecas..Estas últimas estoy convencida dentro de unos años se convertirán en aulas de estudio y museos del libro "clásico".
    Besos de una marcianita que quizás con filmin se vuelva "terrícola".

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  15. Aunque llamen más la atención episodios como este, internet está absolutamente llena de oportunidades, de lo más aceptables ética y legalmente. Y hay que aterrizar en ella y verlas, porque le aseguro que vale la pena.

    Besos.

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