Hasta luego, Lucas
Después de cada intento infructuoso de dar con una emisora de noticias en castellano aceptable, siempre he acabado volviendo a Radio 5. Soy consciente de que la manipulación y la tendenciosidad comienzan con la selección de las noticias y continúan con su descripción, por aséptica que parezca; pero al menos en esa emisora se intenta aparentar objetividad y no hay comentarios editoriales explícitos. Y aun encima cuantitativamente ganan de calle. Ni mucho menos es ideal, pero me parece la mejor opción.
Por eso, por el bofetón que supone a ese estilo informativo, me cabrea especialmente la presencia matinal de Juan Ramón Lucas. Tanto, que normalmente acabo apagándola a mitad de desayuno y volviendo a la música.
Sus comentarios claramente personales, su tendencia a enfoques sensibleros y amarillistas y su tono melodramático, además de profundamente irritantes me parecen muy poco profesionales. Y su supuesta condición de periodista estrella me resulta, además de incomprensible, completamente fuera de lugar en una emisora informativa pública.
Así que, por favor, que lo quiten. Que además seguro que cobra un montón.
Pues a mí, lo poco que escucho de su programa, me gusta. Lo escucho habitualmente a las 9, solamente durante 10 minutos (el tiempo que tardo en llegar en coche desde el cole de mi hija al trabajo). A esa hora suele entrevistar a gente interesante y las preguntas que les hace no me parecen especialmente tendenciosas.
ResponderEliminarcompletamente de acuerdo (y van dos este mes)
ResponderEliminarel problema es cuando opina. Quien opina (que no está prohibido en la opinión pública ya que la objetividad no existe) se arriesga a que le pongan verde. Sus comentarios, no solo son subjetivos: son banales.
Y no entiendo su papel de estrella. Iñaki Gabilondo, por ejemplo, que está a años luz, lo destaca como uno de los mejores periodistas radiofónicos.
Yo, de todas formas, no me bajo de Radio 3. El 95% de su programación me parece un milagro en un país donde los medios de comunicación son tan mediocres.
Es imposible tener un programa de más de tres horas y no opinar. Sobre todo, cuando ese programa no es un mero informativo. Yo le oigo a ratos, me gustan sus entrevistas a políticos, aunque me estomaga bastante su colaborador, Carlos Santos, y sus perfiles: esos si que son tendenciosamente pelotas. Me gusta la parte en que los oyentes llaman (de nuevo, inevitable elegir los que entran y los que no entre los que llamarán), tanto cuando opinan sobre la actualidad como cuando es sobre un tema más o menos frívolo. No me gusta cuando llevan cantantes con disco nuevo (de nuevo, demasiado peloteo) o actores promocionando película. Pero en general, no me parece mal programa.
ResponderEliminar¡Morelli, te estás ablandando!
ResponderEliminarAclaro que yo lo escucho desde alrededor de las siete hasta las siete y media, y se trata de una parte del programa dedicada exclusivamente a las noticias; sin entrevistas, ni reportajes, ni colaboraciones, ni nada: informativo puro y duro.
Y no lo soporto. Empezando por el tono; esa intensidad, ese llegar al fondo... Recuerdo los días del "Alacrana" en Somalia como un ejemplo de dramón anti-informativo.
No quiero que me acerquen la realidad al corazón, quiero que me la cuenten, lo más exhaustiva y contrastadamente posible.
Besos y abrazos.
La tendenciosidad, que conste, no me llama la atención.
ResponderEliminarPero, en cualquier caso, estamos hablando de una radio pública. Se puede opinar, pero no como en las demás: si hay opinión, que se "separe", que haya sección de opinión, y que ésta sea lo más plural posible.
Coincido con Portorosa.
ResponderEliminarYo solía escuchar a Gabilondo en la rdaio. No hay color.
Respecto a Lucas, personalmente me molesta su "cursilería" en el momento de opinar, esa tendencia al melodrama.
Yo lo escucho temprano, de 7 a 8:30, más o menos y suele aportar su toque "rosa" a casi todas las noticias.
sí, sí. Banal y cursi.
ResponderEliminarPero es el tono que triunfa. A saber que audiencia tiene ese programa.
Claro que igual es gracias a gente como vosotros...
A todos se nos atraganta Lucas y él sin saberlo.
Eso era hasta hoy. Este post va a marcar el principio de su declive.
ResponderEliminarYa veréis como en veinte añitos ya nadie habla de él.
tiempo al tiempo
ResponderEliminarNo se lo va a creer, Porto, pero ayer me vendieron en la pescadería un Gallo de San Pedro. ¡Señor Mío y Dios Mío!, pensaba que estaban extinguidos.
ResponderEliminarSirwood.
¿Un Gallo de San Pedro? ¡Dios mío, no me lo puedo creer!
ResponderEliminar(¿Qué es, exactamente?)
Imagínese mi sorpresa, Sirwood: yo no es que los creyera extinguidos; es que no sabía que habían sido creados.
ResponderEliminarBuenos días.
Si es que lo que no sepa Sirwood, no lo sabe nadie. (Por cierto, ha debido aprender a cocinar porque ya no hace consultas de urgencia).
ResponderEliminarEn la radio, tengo sintonizada la SER, y la pongo todos los días al ducharme (a horas diferentes, ahora que vivo en El País de Nunca Jamás). Me gusta lo que dicen el primer minuto, porque luego en la ducha, con el ruido del agua, ya no lo oigo. Más los 3 minutos de secarme y vestirme.
Soy más del modelo de abrir Internet y buscar las noticias yo mismo, incluso en medios poco de masas.
Era para despistar... en casa tampoco podemos con El.
ResponderEliminarPor tanto, Lucas, go home!!
Por cierto, me ha sorprendido una crítica tan nominal.
LLS.
Es que no cabía otra: yo quiero que se vaya él. Al menos de Radio 5; que lo dejen para Radio 1, o como se llame.
ResponderEliminarEsta mañana, de nuevo he tenido que levantarme de la mesa y cambiar a Radio Clásica, mi compañera desde hace más de quince años.
Un beso.
¡Ay, Señor!
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=GVTohSBct70
http://www.youtube.com/watch?v=g2PATIKdVEc&feature=related
http://www.youtube.com/watch?v=2S3zdteYkNI
S.
muy ricos los gallos de san pedro. Exquisito pez de roca. En las baleares es bastante común en los menús (o era).
ResponderEliminarAquí en Galicia se conoce más por el nombre de Sanmartiño (hablo del pez, claro).
ResponderEliminarBeso.
"Cuando llegaron a Cafarnaum, vinieron a Pedro los que cobraban las dos dracmas, y le dijeron: ¿Vuestro Maestro no paga las dos dracmas?
ResponderEliminarEl dijo: Sí. Y al entrar él en casa, Jesús le habló primero, diciendo: ¿Qué te parece, Simón? Los reyes de la tierra, ¿de quiénes cobran los tributos o los impuestos? ¿De sus hijos, o de los extraños?
Pedro le respondió: De los extraños.
Jesús le dijo: Luego los hijos están exentos.
Sin embargo, para no ofenderles, ve al mar, y echa el anzuelo, y el primer pez que saques, tómalo, y al abrirle la boca, hallarás un estatero; tómalo, y dáselo por mí y por ti."
Mateo 17:24-27
S.
No es por nada, pero si Mateo dice que quien cogió el pez fue Pedro, casi seguro que fue Pedro, y no Martín, que Mateo se equivocaba pocas veces.
ResponderEliminar:-)
S.
María, el argumento parece irrefutable.
ResponderEliminarBuenos días.
ante la ciencia, no hay más remedio que inclinarse
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