11.1.11

Ya están aquí



Así es. Me lo han traído los Reyes.

Apenas lo he empezado a usar, y además el propósito fundamental del regalo es que lo utilice para estudiar, más que para leer, pero por el momento puedo decir:

A favor:
- Obviamente, que lleves, literalmente, cientos de libros en un bolsillo. O, para el estudio, que lleves encima toda la bibliografía que necesites sin depender de ordenadores o conexiones a internet (además este lector admite subrayados y toma de notas sobre el texto).
- Los precios de los libros son mucho más bajos. Mucho.
- Hay muchísima literatura clásica gratuita (por ejemplo ese que ven, Dublineses, de Joyce).
- Ya no importa dónde vivas para comprar un libro; incluidos los libros en otros idiomas (por cierto, trae varios diccionarios con acceso directo desde el texto).

En contra:
- La lectura, aun siendo buena (muy buena, incluso), resulta menos natural... de momento.
- No es un libro: no tiene su tacto ni su encanto.
- Le das a un botón y te quedas sin él, no lo atesoras; y veo difícil que duren años y se hereden de padres a hijos. Da cierta sensación, por tanto, de inconsistencia.
- No decora (no hay nada que me guste tanto en una casa como los libros; por eso que no ocupe espacio en ella no lo incluyo entre las ventajas).

Al margen de la cuestión evidente del espacio, para mí lo fundamental es, y va a ser, las nuevas posibilidades que surgen a la hora de comprar. Parece claro que, una vez más, asistimos al comienzo de un gran cambio.

21 comentarios:

  1. Otra desventaja (probada, en mi caso): leer horas y horas seguidas un libro es una sensación plena, que a mí me deja bastante en paz conmigo misma (y mi salud). Leer horas ahí en esa pantalla es una pequeña tortura. Primero los ojos. Luego las manos, los dedos. Después la cabeza.

    Sigue pareciéndome muy útil para trabajar, lo tengo desde hace un año. Pero para leer por placer: nanai de la china.

    Eso sí, es un buen regalo!
    Nos vemos el sábado!

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  2. ¿Sí?
    Aún no lo sé, no he pasado de media hora seguida.
    Lo de los ojos, pues si es será; ¿pero lo de los dedos y las manos por qué? Yo tengo una funda/pastas que permite agarrarlo como un libro normal...

    Nos vemos, sí. Un beso.

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  3. Yo no tengo funda, así que tengo que cogerlo con la mano abierta todo el rato, lo que se hace muy incómodo.
    De todos modos no es un libro normal porque todo el peso cae en un lado. Y el peso, aunque sea poco, también me resulta incómodo (más que un libro enorme). Además es algo metálico, frío, no sé, está guay un rato, pero yo por curro tengo que leer varias horas seguidas. Lo que me resulta más cómodo es ponerlo en el atril y sentarme en el escritorio. Así que ya ves la contradicción.
    Pero es mi caso...

    Besos!

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  4. ¡Vade retro!
    Por Dios, cuantas moderneces...
    El libro, libro, como la mujer, mujer, que decía un político antiguo con bigote. :-P

    Nos vemos,
    Besos,
    J.

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  5. Jo! Fer yo tengo un Ipad que me han regalado mis hijas por Hanukkah y aun asi, sigo mas a gusto con un libro de papel, aunque eso signifique celulosa sacada de un arbol.

    Yo creo que en un desastre nuclear los aparatos como el tuyo y el mio, son los primeros en desaparecer, no asi un libro de papel Fer.

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  6. No se puede gastar energías en combatir las nuevas tecnologías. Valen para lo que valen y se instalan. Para mí, que terminaré haciéndome con uno con el tiempo (serán mejors y más baratos), los dos puntos a favor fundamentales son: 1) puede agrandar el tipo de letra, y como voy perdiendo vista, será una ayuda; y 2) cuando la cosa se haya normalizado, podré hacerme con los libros que quiero desde cualquier lugar.

    Los dos grandes puntos en contra son: 1) quizá solo las editoriales grandes, económicamente poderosas, puedan aguantar el tirón de la novedad (pirateo, etc), lo que llevaría a la desaparición de las editoriales independientes (realmente interesantes) y de los escritores que empiezan con ellas, e incluso se pueden pasar la vida en ellas tranquilamente; y 2) las librerías pequeñas, de gente que sabe de literatura, son el punto de contacto imprescindible entre el lector y las obras: si esto las afecta más de lo afectadas que están ya, y perdiéramos esos intermediarios, sería un golpe muy duro.

    Los dos grandes puntos negativos podrían conducir a una banalización de la escritura. Y he dicho "podrían", como un riesgo, no como un hecho.

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  7. Estoy de acuerdo con NáN. Y supongo que con los demás. Pero lo de NáN me parece muy importante: la uniformidad, el main stream... ¿Será así? ¿Supondrá eso?

    ¿Y no sería posible la pequeña editorial virtual...? ¿O las amenazas son excesivas?

    Independiente, ¡tú qué vas a decir!

    En todo caso, no sé lo rápido que irá todo, si va.

    ¿Será una locura abrir hoy en día una pequeña librería, digamos, independiente...?

    Besos.

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  8. si a mí me cuesta leer más de 10 páginas en la pantalla de un ordenador, con más motivo me costaría en algo que es unas 6 veces más pequeño.

    Lo de la bibliografía a cuestas es muy discutible. Cuantos libros eres capaz de consultar a un tiempo para hacer un trabajo. Tantos que no caben en una pequeña estantería? Tantos que no caben en "favoritos" de tu navegador?

    Lo de la letra se puede agrandar, sí, pero a costa de ver menos letras.

    Pero la mayor desventaja es la misma que tiene un centro comercial frente a las tiendas del centro de una ciudad.

    Con el chisme este no se curiosea como en una librería. No hay imprevistos. Tu descargas los títulos y eso es lo que llevas en el aparato. No te vas a encontrar nada por sorpresa. En el trasto ese todo está predefinido.

    Es un pasito más, creo yo, en la deshumanización de la cultura.

    Con respecto a las ventajas materiales, no se yo si el "proceso" de extraer de las entrañas de Africa los metales raros que se usan para estas tecnologías es más sostenible social y ambientalmente que esperar que un arbol crezca con energía renovable para hacer papel con su materia.

    regalo del demonio, envidia del carajo...

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  9. Lo importante es la intención, Porto.

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  10. Los Reyes Magos me querían traer uno a mí este año y me negué en redondo. ¡NO! La cuestión para mí es simple (y de deformación profesional): los libros de ipads y demás milongas no están diseñados. No es que haya maquetado muchos libros en mi vida, pero alguno me ha tocado, y cuesta ¡no veáis si cuesta!

    Son un "simple" word que se descarga en el aparato. Sí, está bien que la tipografía se pueda aumentar de cuerpo y demás, pero ¿dónde quedan los criterios de legibilidad? Yo me niego a leer "Dubliners" en Verdana existiendo hoy por hoy las magníficas Bodoni, Garamond o Book Antiqua. Ehem, me dejo de tecnicismos. ;-)

    He oído una vez en la radio que hay pequeñas editoriales de corte independiente que están empezando a fabricar libros más elaborados, con ilustraciones por ejemplo. No me quedé bien con la información...

    No sé. A mí no me gustan, la verdad. ¿Y el olor de los libros? ¡Ay, si es de los más ricos!

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  11. Por supuesto, Filla. Tú, del comentario de Morelli, quédate con lo de la envidia del carajo.

    En serio:
    Al discutir del ebook estamos discutiendo, en gran medida, sobre internet, y no tanto sobre el aparato, que no es más que un resultado más de otros cambios mayores. Y tanto las ventajas como los inconvenientes parecen, en casi todos los casos, evidentes. También parece que no hay vuelta atrás.
    Yo supongo que sí, que hay deshumanización en el paso de entrar en una librería a hacerlo en una página web. Como lo hay en hablar aquí en lugar de alrededor de una mesa. Pero también sé que en un caso y en el otro surgen posibilidades, como demostramos nosotros cada día.

    Más peliagudo me parece lo que decía NáN de los efectos sobre los canales de distribución. Porque de un canal de distribución se trata; igual que en el caso de las películas o la música. Y es un problema que debe resolverse y que da para muchas discusiones. En cualquier caso, los cambios serán inevitables.

    En cuanto a la pantalla, y aunque todavía no he comprobado si lo que dice Lara es cierto, no tiene nada que ver con leer en un ordenador, Morelli (tampoco yo leo en el ordenador nada que pase de una página). Esto no tiene luz, y es tan grande como un libro de bolsillo, más o menos.
    Y la ventaja de cara al estudio es, como decía, precisamente poder "llevarlo contigo". Si estás en casa, con tus papeles y tu ordenador, no tiene sentido. La utilidad consiste en irte un fin de semana y llevar todo encima, o a una biblioteca.

    Pero bueno, creo que de lo que hablamos es de la influencia de internet en la creación cultural, en última instancia.

    El encanto del libro, que dice Cal (un beso, Cal), y cuestiones de diseño, también me parecen innegables. Y es una pérdida, en cierto modo; como lo fue pasar de los manuscritos a la imprenta, por culpa de Gutenberg. Pero abrió unas cuantas puertas a cambio, ¿no? Además, mejorarán, y nos acostumbraremos.

    Por lo demás, me surge otra pregunta: ¿hablamos de ebook en lugar de libro, o de ebook además de libro? La cuestión es si lo acabará sustituyendo, o no.

    Saludos.

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  12. A mí no me importa tanto si lo acabará sustituyendo. Es evidente que no en nuestro caso. Será (es) un plus de información, pero seguiremos comprando libros para leerlos en un sillón (por eso no me importa tanto si lo acabrá sustituyendo, pero me importa más cómo, en mi plazo de vida, podrá influir en lo que se publica y cómo).

    Veamos las cartas, por ejemplo. Mo madre dedicaba dos o tres horas todas las mañanas a leer cartas y contestarlas. Cualquier acontecimiento era digno de ser comunicable, desde cómo se sentía uno al Pepito empieza el bachillerato superior. Lola y yo, en los primeros años, nos comunicábamos por carta cuando ella viajaba: como tardaban tanto, yo tenía la lista de hoteles y la mañana que se iba ya le había enviado tres cartas (escritas en el cuarto de al lado de donde estaba, pero sin que ella me viera).

    Pero después de eso, posiblemente porque el teléfono (y pagar su cuenta) se hizo accesible, se hizo el silencio de la escritura.

    Y ahora, en tiempo "real" comunicamos un montón de cosas por el correo electrónico.

    Es decir, el mail no sustituyó al correo postal: rompió un silencio.

    Con los libros hay que pensar en una cohabitación. Si yo estuviera estudiando y necesitara manejar mucha bibliografía, tendría uno de esos, pero no solo para un viaje. Una tarde, sales de tu casa a dar un paseo, encuentras una terraza frente al mar, sacas tu "aparato" y te quedas dos horas leyendo y tomando notas. Eso va a ser imparable.

    ¿Leer a Shakespeare o a Cela? Lo dudo. Porque dos libros en la mochila son llevaderos y tardas días en leerlos.

    Problema apocalíptico: las bibliotecas en ruinas de griegos y latinos pudieron ser rescatadas y reutilizadas siglos más tarde.

    El hundimiento de la falla de San José, dos días de inicio de una guerra global, nos pueden dejar con un kindle o un pendrive de 60 GB en las manos sin modo de usarlos. Podremos lavar a ano enun río, pero no extraer la información. PEro esto no va a detener las nuevas tecnologías de comunicación.

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  13. no sé, no sé...

    está en inglés

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  14. ¡Vaya pedazo de regalo!Has debido ser muy bueno.
    Me encanta el cacharro, pero también me gusta ver la estantería con sus tomos.
    Un abrazo

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  15. Si utilizamos la lógica pura y dura haciendo un razonamiento comparado con los manuscritos y la imprenta de Guttenberg, te podría decir que hoy en día aún existe gente (muy poquita, eso sí, y casi todos en Urueña o en Logroño) que hace manuscritos. Yo misma escribo de un modo totalmente amateur en carolingia del siglo IX. Así que es posible que la imprenta clásica pase a ser cosa de un grupúsculo de gente. Como los vinilos, por ejemplo.

    También espero que el diseño editorial de los ebooks evolucione un poquitín porque si no... Otro beso para ti.
    ;-)

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  16. Tenemos los dos la enfermedad de la lectura, y la casa repleta de libros.y unos cuantos mas en cajas en casa de los padres.
    El va por su segundo ebook. (Cuidado Sr.Portorosa, un pequeño golpe y la pantalla de su ebook se rompe, y cuesta más de la mitad de lo que vale su ebook nuevo). Yo en breve, compraré uno para mí.
    El trabaja en el extranjero, y, se acabó lo de la maleta repleta de libros, o comprar cualquier cosa en la T4 para largas horas de espera y de vuelos.
    Ayer vino del Corte Inglés con una bolsa llena de libros impresos. 'Y eso, le dije'????...'Es que tenía mono de libros'...siempre cae alguno pero hacia meses que no volvía con tantos.

    Leer no es sólo 'leer' literalmente. La satisfacción de tener el libro impreso, tangible, presente en la estantería, su lomo a la vista, el roce de la punta de los dedos al pasar las páginas, poseer una buena edición... noe s comparable a un archivo EPUB, o PDF. vaya, si no es lo mismo!!!

    Creo que con los ebooks ocurre como con los pirateos de música. Si a uno le gusta un libro, se lo compra impreso. el placer de tener. si a uno le gusta un disco, no renuncia a tenerlo 'fisicamente' y no como un mero archivo de mp3 en el ordenador.

    disfrute su ebook.

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  17. se podría dar el caso de que la posibilidad de tener pdfs degenere en "mi tesoro"...

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  18. Efectivamente, Morelli, eso es lo que ocurre, no es una posibilidad, es una realidad...porque quien tenga un ebook y no haya acudido a la red para 'agenciarse' bibliotecas de 3200, 3370 o 2500 libros en pdf, epub o lo que sea, que no leería en una vida, que la mitad no le interesan, etc... debe de ser una verdadera minoría.

    no deja de ser una verdadera 'rapiña', claro está...

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  19. No le he dado la bienvenida, Erodiade. Lo hago ahora. Siéntase usted en su casa.

    Decía yo ayer que me pusieron delante un archivo con tres mil y pico títulos. Y, efectivamente, uno está tentado a copiarlos todos. Pero yo me quedé con... tres.

    Estoy de acuerdo con todo lo que dices de los libros. Y, sin embargo, yo ayer me tumbé en mi chaise-longue, con mi flexo al lado, y leí... ¡mi ebook!


    Buenos días.

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  20. Bienhallada Sr.Portorosa, muy agradecida por su bienvenida.

    Este verano tecleé 'IKEA Galicia', y la casualidad quiso que encontrara una entrada de su blog, el cual he seguido puntualmente, y leído todas sus entradas, pero hasta ahora no me había atrevido a comentar nada.

    Por supuesto que puede ud. disfrutar de su ebook, ya le digo, yo en días encargaré el mío, de momento, 'hago mío' el de mi pareja.

    Precisamente hoy, leía que en muchas bibliotecas públicas, incluida la de mi ciudad, ya disponen de 'dispositivos ebook' para los usuarios (cosa que no entiendo), y así mismo de ebooks para que el usuario acuda con su 'dispositivo' y los cargue allí mismo.

    Sinceramente creo que no ocurrirá eso de 'video killed the radio Star'... puede parecerlo, pero ocurrirá como los vinilos, que hace un par de años 'vuelven con fuerza'...aunque sea sólo para nostálgicos y a precios que sólo éstos estén dispuestos a pagar.

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  21. El agradecido soy yo, se lo aseguro.

    Así que "IKEA Galicia". Esto aún me sigue asombrando :)

    Justo ayer me enteré yo también de lo de las bibliotecas; y tampoco yo lo entiendo muy bien. Supongo que la idea será completar la oferta actual...

    Un beso.

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