Si vivir es posible
Hace tiempo que no toco el tema, pero muchas veces he escrito sobre mi visión de la infancia como la época en la que todo aún es posible; y sobre cómo crecer, para mí, es ante todo elegir, escoger, y por tanto renunciar a todas las demás posibilidades.
Creo que es así, y entiendo que despierte en mí los sentimientos que despierta.
Lo que me resulta difícil de comprender es el proceso mental que me lleva a preferir no decidir antes que enfrentarme a la renuncia. Lo pasmoso es que llegue a creer que la forma de asegurarme el poder seguir tomando cualquier camino es no avanzar.