¡Espabila!
Lo malo de las obviedades es que demasiado a menudo las obviamos.
La mejor manera de librarse de un problema es resolverlo.Brenda Francis
...si se puede, añado yo, que soy muy así. Pero vamos, que se puede más de lo que nos gusta pensar.
Estimado Portorosa, es que me lo ha puesto usted, como se suele decir, a huevo:
ResponderEliminarUn problema, cuando no tiene solución, no es un problema, es un dato.
(Manquiña dixit)
Ya, ya sabía yo; y estuve a punto de completar la entrada con eso, pero preferí centrar el tiro, que luego los lectores se me dispersan mucho.
ResponderEliminarno siempre al resolver un problema este acaba de raiz..por eso hay que persuadirlo muy bien para que el problema deponga la actitud y se marche, pero bueno no siempre sabemos como hacerlo. por eso hay algunos que buscan una curita y se lo ponen encima del problema creyendo que este mejorara, y en absoluto,pues nada...lo otro es no quedar con cargo de conciencia, pero ya eso es otro tema.
ResponderEliminarA las penas hay que matarlas cuando son chiquitas. (sin miramientos)
ResponderEliminarLos problemas, ay, normalmente se reproducen por gemación.
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ResponderEliminarResolver los problemas. ¡Cuidado!, algunos de estos procesos resolutivos pueden degenerar en obsesión si no se dá con la solución.
ResponderEliminarNo es muy indicativo, ya que sobrepaso con creces la T.M.M. (Tara Mental Media), pero a mi me pasa.
Un abrazo.
lo bueno de las obviedades, es que siempre se presentan desnudas. Nosotros, acostumbrados a las formas, sólo registramos aquello que vemos con una ornamenta encima.
ResponderEliminar¿Espabilar?
ResponderEliminarSi estamos todos mortecinos.
¡A ver si vamos a tener un problema de comunicación.
Yo es que ando muy liado con la Unión Africana.
ResponderEliminarY además estaba escribiendo la entrada siguiente, la de vuestra presentación.
Abrazos.