Gracias, señorita (o señora, como prefiera, si no gusta del diminutivo).
Si quiere que le diga la verdad, yo muy horno no me veo (lavadora tampoco, para qué le voy a engañar; lavadora, menos). No me veo como ningún electrodoméstico; y si amplío el radio de selección a los muebles me veo como una lámpara de pie, o, desde hace tres años y por motivos evidentes, como una silla.
Creo que nadie le ha entendido pero bueno, no se desanime... Si el horno no está para bollos no se preocupe que son cosas de la primavera, que nos hace subir y bajar sin previo aviso. Y a los gallegos aún más. Nos gusta dejarnos elevar por las nubes, envolver por las nieblas y quemar por el sol. Anímese.
otra vez desayunando? o es una de sus bromas de machito imbécil?
ResponderEliminar:-p
No.
ResponderEliminarNo (desde luego, el que la oiga, qué pensará de mí).
El horno soy yo (soy mucho más modesto que Luis XIV; con razón).
Buenos días.
Por favor, queridos lectores, no piensen nada malo del Sr. de Portorosa, es un buen hombre, aunque aristócrata -qué le vamos a hacer.
ResponderEliminarMi comentario era una pequeña broma cómplice que sacada de contexto puede resultar algo insultante, pero no.
Buenos Días.
Es usted un horno?
Yo soy una lavadora!!!
Gracias, señorita (o señora, como prefiera, si no gusta del diminutivo).
ResponderEliminarSi quiere que le diga la verdad, yo muy horno no me veo (lavadora tampoco, para qué le voy a engañar; lavadora, menos). No me veo como ningún electrodoméstico; y si amplío el radio de selección a los muebles me veo como una lámpara de pie, o, desde hace tres años y por motivos evidentes, como una silla.
Tú ya estás muy horneado, caballero. Un abrazo.
ResponderEliminarBuenos días...
ResponderEliminarEstoy con rhyt.
Horneado, preparado y casi centrifugado.
Da gusto verle así.
Luna
Sebas, Luna, sois vosotros que me veis con buenos ojos.
ResponderEliminarBesos y abrazos.
Uy. Que gallego te ha quedado.
ResponderEliminarBuenos días.
ResponderEliminarMe parece que demasiado, Princesa, ni aquí me han entendido, por lo visto.
Besos.
Creo que nadie le ha entendido pero bueno, no se desanime... Si el horno no está para bollos no se preocupe que son cosas de la primavera, que nos hace subir y bajar sin previo aviso. Y a los gallegos aún más. Nos gusta dejarnos elevar por las nubes, envolver por las nieblas y quemar por el sol. Anímese.
ResponderEliminarGracias, Nube. Será la primavera (no, qué va a ser, pero bueno).
ResponderEliminar