7.5.17

Táboa Redonda: Madrid en pintura



Madrid en pintura


"Primer café en la máquina de al lado del ascensor: en lugar de un café con leche me sale un cortado con virutas de chocolate. Son casi las doce. Subo a mi habitación a acostarme.

En llegar desde el hotel a mis clases tardo, en metro, 54 minutos. Aquí lo ven normal y a mí me pasma. Como si voy a trabajar todos los días desde Ferrol a Santiago. Lo único bueno es que garantiza casi dos horas diarias de lectura.

He venido con ganas de ver cuadros y tengo dos tardes libres. La primera voy al Prado a ver una exposición temporal, una selección de la Hispanic Society of America. Una de esas cosas que por sí solas justifican venir a la capital. Veo una Biblia de 1250, de Soissons, con una caligrafía que cuesta creer, y que obliga a pensar qué tipo de seres eran los copistas. Mejor letra que el emperador Carlos V tenían, como compruebo en una carta manuscrita a su hijo diciéndole cómo gobernar en su ausencia. Hay también un decreto suyo mandando doblar el sueldo a Tiziano. Un mapamundi de Giovanni Vespucio, el sobrino de Américo, de 1526, es un viaje fantástico en el tiempo: India Intraganges y Ultraganges, Valaquia, Etiopía superior e inferior, la Tierra de los Bacallaos colocada casi al lado de Florida, y una América que se va difuminando hasta quedarse sin costa oeste. Y, por fin, la pintura: tres Sorollas increíbles, de los cuales me llama la atención, por ser menos conocido, “Los pimientos”, con una raya de luz del sol que, junto con los remolinos del agua de “Idilio en el mar”, solo puede pintar un genio; y dos Velázquez. Me quedo diez minutos maravillado por la perfección de su “Retrato de una niña”. Goya no me gusta. Lo siento, pero ya estoy harto de fingir: no me gusta, y punto.

Al salir, veo en la verja del Ritz los precios de la terraza: la ración -100 g- de Beluga está a 520 €, y si optamos por el caviar Imperial la cosa sube a 620. Pero además hay una oferta, porque por 379 € más -999 en total- podemos añadirle una botella de champán Krug Vintage. Yo creo que la gente estos chollos no los sabe y se los pierde. Una pena.

El martes voy al Caixaforum a ver una exposición del pintor Ramón Casas, que no conocía. Principios del siglo pasado, amigo de Sorolla, Rusiñol y algún otro afincado en París. Me encanta, aunque el cuadro que más me impresiona es un retrato de Sorolla pintado por un tal Anders Leonard Zorn.

Último café en la máquina de los ascensores: en lugar de café con leche me sale un vaso de leche caliente con azúcar. Hacía unos cuarenta años que no bebía eso, y recuerdo por qué. Son casi las doce. Subo a mi habitación a acostarme."

Publicado en el suplemento Táboa Redonda del domingo 7 de mayo de 2017


8 comentarios:

  1. En la capital son más las cosas positivas:
    Museos, la primera imagen Ud. la denomina “Zorn.jpg”, cabe pensar, ese sea el personaje representado.
    Pero pasar dos horas en el subterráneo le podría resultar inabarcable a cualquier gallego, tenemos mucho vicio los provincianos…
    El mismo vicio con el café… inaudito para cualquier provinciano, solicitar un café con leche y obtener un café… Imaginable el jaleo en provincias con el camarero.
    Una máquina no piensa ni razona, esa es la razón que se puede argüir con respecto al dispensador automático…
    Es para meditar en penumbra y completo silencio por el cambio de aires impuesto en la capital.
    Claro que con el paro existente, es difícil elegir la residencia laboral: en estos tiempos puede encontrarse en Europa u otro lugar más alejado. Bienaventurado el que pueda elegir el destino de su agrado…
    Muchas Gracias por lo del Ritz, en su texto:
    “Yo creo que la gente estos chollos no los sabe y se los pierde. Una pena.”
    Es para tener en cuenta su aviso.
    Permítaseme añadir que, uno parado frente a la barrera de esa verja –infranqueable del Ritz- el texto “que tomo prestado de uno de los blogs” que Ud. sigue:
    “me sentía exactamente igual que un marciano disfrazado para pasar desapercibido.”
    Y también del mismo autor:
    “Cada semana escribes mejor…”
    Dicho sea con el mayor de los respectos de su alegre –irónico- y magnífico texto hoy publicado en Táboa Redonda nº 80 y en su BLOG.

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  2. Pues no vayas a la de lewis baltz en Maphre. Horrible

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  3. Gracias a ti, Manolo.

    No estoy en Madrid ya, Pedradas, así que no corro ese riesgo.

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  4. Para ir al trabajo en metro (siempre en metro) tardaba unos 12 minutos. Otros tantos para volver. Al llegar a mi estación y cerrar el libro sin siquiera haber terminado un relato, me cabreaba.

    Cuando nos llevaron a Pinar de Chamartín, 55 mi nutos a la ida y otros tantos a la vuelta. Casi dos horas de lectura en un día de trabajo, lo que superaba todas mis expectativas. Me sentí feliz y afortunado.

    Lo del caviar más el brut vintage me revuelve. En cambio.

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  5. Muy interesante lo que escribes, como siempre. Creo que hemos ido a Madrid solo por exposiciones de fotografía, últimamente. A mí sí que me gusta Goya, aunque no sé si tiene mucho mérito ya que me he encontrado con su pintura desde pequeño. He estado algunas veces en su pueblo, Fuendetodos, en las fiestas y hemos visitado con nuestros hijos, y solos también, su casa natal, en la que hay una exposición permanente de sus grabados. En fin, los demás que nombras también me gustan, aunque entiendo poco de pintura, eso también es verdad.
    Hasta 1989 no hubo agua potable, corriente, en Fuendetodos, y yo fui allí cuando todavía no la había. Bastante antes estuve, con mi primer grupo, en verano, en Bujaraloz, en plenos Monegros, precisamente para celebrar la llegada del agua corriente. ¿No es bastante increíble?.

    Un abrazo

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  6. Es curioso, NáN, lo del tiempo para leer. El reverso de la moneda.

    Es increíble sí, J.L. Y gracias.

    Un abrazo a ambos, desde esta esquina.

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  7. Tecnología fotográfica y bellas imágenes. Un paseo bicicletofotográfico por Madrid:
    http://solofotography.blogspot.com.es/2017/02/un-paseo-bicicletofotografico-por-madrid.html

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  8. Espectacular la exposición. Mucho más cómoda y fácil de ver que en su sede original. Sobre el caviar... se está dando muy bien la cría del esturión en la Mancha. En breve esas huevas serán una vulgaridad. ;-))

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